Academia masónica rinde homenaje a Mozart
En el marco de las actividades programadas para conmemorar el 220 aniversario del fallecimiento del músico y masón Wolfgang Amadeus Mozart, la Academia Cubana de Altos Estudios Masónicos dedicó a este acontecimiento la Sesión Solemne y Pública, efectuada el lunes 7 de noviembre, en la cual el Sr. José Reyes Fortún, académico de Número de la Sección de Historia de la Corporación, expuso el trabajo “Mozart, hombre, músico y masón”.
Además de los académicos, en el acto se hallaban presentes el Gran Maestro de la Gran Logia de Cuba, Sr. José Ramón González Díaz, y el Diputado Gran Maestro Evaristo González Torres, quienes se hallaban acompañados por el Gran Maestro de Ceremonias y el Gran Tesorero de esta Institución. Es de destacar la presencia del Sr. Néstor Juan Iglesias Laza, Miembro Emérito de la Academia. El público asistente estuvo compuesto por masones de diversas logias de la ciudad, entre los cuales se hallaban el Maestro de la logia Habana, Sr. Antonio Díaz Nieves. En su exposición, Reyes Fortún ubicó a Mozart en el contexto del país y de la época en la cual vivió; resaltando las condiciones familiares y sociales que rodearon al músico durante sus primeros años de vida.
Reyes indicó que la actividad masónica de Mozart, se ha podido conocer porque “las actas de la logia Verdadera Concordia”… “se han conservado hasta nuestros días…”, por la que se ha podido saber de primera mano, que Mozart dedicó alrededor de quince composiciones a la masonería, entre ellas se destacan Alegría Masónica, La Flauta Mágica, Adagio in canon y Pequeña Cantata Masónica. En estas obras se puede apreciar la espiritualidad del músico, así como su percepción de la fraternidad, y su desapego hacia lo material. Según Reyes, “… hasta ese momento la masonería carecía de una música…”; por lo que Mozart se dio a la tarea de crear un simbolismo musical masónico.
Reyes finalizó su discurso citando parte de las palabras pronunciadas por Karl Friedrich Hensler, quien señaló: “(…) Ha sido voluntad del Gran Arquitecto del Universo cortar la cadena de uno de nuestros miembros más amados y sobresalientes. ¿Quién no lo conocía? ¿Quién no lo amaba? ¿Quién no lo admiraba? Nuestro meritorio hermano Mozart (…) era un masón que por su intelecto (…) nunca perdió calidad humana…”. Mozart fallece el 5 diciembre de 1791, probablemente a causa de las complicaciones derivadas de la insuficiencia renal crónica que padecía.
Fuente: Cubanet
Además de los académicos, en el acto se hallaban presentes el Gran Maestro de la Gran Logia de Cuba, Sr. José Ramón González Díaz, y el Diputado Gran Maestro Evaristo González Torres, quienes se hallaban acompañados por el Gran Maestro de Ceremonias y el Gran Tesorero de esta Institución. Es de destacar la presencia del Sr. Néstor Juan Iglesias Laza, Miembro Emérito de la Academia. El público asistente estuvo compuesto por masones de diversas logias de la ciudad, entre los cuales se hallaban el Maestro de la logia Habana, Sr. Antonio Díaz Nieves. En su exposición, Reyes Fortún ubicó a Mozart en el contexto del país y de la época en la cual vivió; resaltando las condiciones familiares y sociales que rodearon al músico durante sus primeros años de vida.
Reyes indicó que la actividad masónica de Mozart, se ha podido conocer porque “las actas de la logia Verdadera Concordia”… “se han conservado hasta nuestros días…”, por la que se ha podido saber de primera mano, que Mozart dedicó alrededor de quince composiciones a la masonería, entre ellas se destacan Alegría Masónica, La Flauta Mágica, Adagio in canon y Pequeña Cantata Masónica. En estas obras se puede apreciar la espiritualidad del músico, así como su percepción de la fraternidad, y su desapego hacia lo material. Según Reyes, “… hasta ese momento la masonería carecía de una música…”; por lo que Mozart se dio a la tarea de crear un simbolismo musical masónico.
Reyes finalizó su discurso citando parte de las palabras pronunciadas por Karl Friedrich Hensler, quien señaló: “(…) Ha sido voluntad del Gran Arquitecto del Universo cortar la cadena de uno de nuestros miembros más amados y sobresalientes. ¿Quién no lo conocía? ¿Quién no lo amaba? ¿Quién no lo admiraba? Nuestro meritorio hermano Mozart (…) era un masón que por su intelecto (…) nunca perdió calidad humana…”. Mozart fallece el 5 diciembre de 1791, probablemente a causa de las complicaciones derivadas de la insuficiencia renal crónica que padecía.
Fuente: Cubanet