Tributo a María Teresa - Gustavo Pardo Valdés

martes, 5 de abril de 2011

Tributo a María Teresa - Gustavo Pardo Valdés


A cien años de la primera presentación artística de María Teresa Vera, la licenciada Madalina Cobián González presentó el tema “María Teresa Vera, una mujer valiente” en un evento patrocinado por la Academia Cubana de Altos Estudios Acacistas, el sábado 26 de marzo.
La actividad estuvo presidida por la licenciada Daysi Rodríguez Mancebo, presidenta de la entidad, y contó con la asistencia de la Gran Tesorera Adjunta del Gran Consejo, licenciada Miriam Rodríguez Rivero, Alicia Calvo, Gentil Mentora de la logia No. 1”, y de acacias y masones en general. La disertante abordó aspectos de la personalidad de María Teresa Vera; señalando su posible militancia en la Orden Acacista.
La familia Vera era oriunda de Guanajay, provincia de Pinar del Rio. La madre de María Teresa trabajaba como cocinera en la residencia del periodista y escritor masón, Joaquín Nicolás de Aramburu. La familia se traslada a La Habana acompañando a los Aramburu; residiendo en distintos lugares a causa de la precariedad económica por la que atravesaban los Vera; entre ellos, el solar La Maravilla, en San Lázaro # 201.
En este sitio fallece su cuñada. María Teresa, con sólo 15 años, asume la tutoría de cuatro menores. La conferencista constató que al mudarse la trovadora al barrio de Pogoloti, en Marianao, actuó en diversas actividades artísticas efectuadas en el templo de la logia masónica Hijos de Antonio Maceo, en la calle 94 # 5518.
Para determinar si María Teresa perteneció a la Organización Acacista, Cobián entrevistó a la señora Florinda García, fundadora de la filial 93, quien expresó que María Teresa “reunía todas las condiciones para ser miembro de esta Orden”.
Masones que la conocieron afirman que los sábados, ella solía vestir de blanco; y algunas vecinas dicen que en ocasiones le oyeron decir “que iba para la logia”. La Sra. María Piover, Secretaria de la Logia “Hijas de la Acacia No.57”, afirmó que fue testigo ocular, en 1959, de la destrucción y quema de los expedientes de las hermanas Acacistas, que no tuvieron la más mínima relación con el gobierno saliente de Cuba.
Se dice que fue un ex oficial del ejército constitucional de Cuba quien presentó a María Teresa en esta Asociación. La expositora concluyó afirmando: “Si fue Hija de la Acacia o no, no podemos asegurarlo todavía por falta de evidencias, pero sí podemos decir que vivió una vida estrechamente vinculada a la Masonería”.
María Teresa Vera, mujer excepcional, falleció a consecuencia de un derrame cerebral, en el hospital Carlos J. Finlay, el 17 de diciembre de1965. La logia Hijos de Antonio Maceo, ofreció su templo para velarla, pero la Sociedad de Artistas no lo permitió y se hizo cargo de todo.

Fuente: CUBANET