Jesús Luciano Armada Pena, Soberano Gran Comendador de Cuba, presentó su renuncia

sábado, 21 de enero de 2012

Jesús Luciano Armada Pena, Soberano Gran Comendador de Cuba, presentó su renuncia


por José A. Pérez Gallo

Según una fuente que pidió permanecer en el anonimato, en la Sesión Anual efectuada por el Supremo Consejo del Grado 33 para la República de Cuba, el pasado sábado 14 de enero, el Sr. Jesús Luciano Armada Pena, Soberano Gran Comendador de esta Entidad, presentó su renuncia a dicho cargo.

En carta dirigida a ese alto Organismo Masónico, Armada Pena plantea que “considerando mi avanzada edad, y los serios trastornos cardio-vasculares que padezco; así como el cansancio de 54 años de labor ininterrumpida en la Masonería Escocesa, ruego acepten mi renuncia irrevocable al cargo de Soberano Gran Comendador del Supremo Consejo para la República de Cuba…”

Según expresaron algunos de los miembros de la Organización que fueron consultados al respecto, “aunque desde hace algunos días se rumoraba que Armada iba a presentar su renuncia en esta sesión, hasta el inicio de la misma no existían elementos que lo garantizaran”.

Según la fuente antes citada, dicha opinión quedó ratificada, por Lázaro Cuesta Valdés, quien presidía la reunión por sustitución reglamentaria de Armada, el cual explicó a los presentes, que aunque en el punto 12 del Orden del Día circulado decía: ”Celebración de Elecciones Parciales, debió de haberse puesto los cargos para los cuales se efectuarían las elecciones” (…) añadiendo más adelante que, “producto de la inseguridad de muchas cosas, no teníamos la certeza de que las cosas pudieran fluir en un ambiente de armonía como lo estamos haciendo…”. Muchos presumen que Armada tomó a última hora la decisión de renunciar; probablemente a la posibilidad de ser acusado de corrupción y sometido a un nuevo proceso, del cual podrían derivarse consecuencias impredecibles.

Efectuada las elecciones, Lázaro Cuesta Valdés, y Adalberto Concepción González, resultaron elegidos para ocupar los cargos de Soberano Gran Comendador y Teniente Gran Comendador respectivamente.

Al concluir la sesión, algunos de los asistentes a la misma dijeron que “según los informes emitidos sobre el estado actual del Supremo Consejo, se pudo apreciar que el legado que Armada Pena ha dejado, es el de una Institución en crisis.

Fuente: CUBANET