La Masonería vuelve a Almería tras 72 años de ausencia
Con el nombre de "Puerta de Oriente", se ha constituido en Almería el primer Triángulo Masónico desde que en 1936, a causa del inicio de la guerra civil española, la Masonería fuese prohibida, perseguida y aniquilada. El Triángulo Puerta de Oriente, está constituido por hombres y mujeres que residen en Almería y provincia, pertenecientes a la R.L. Nicomedes Gómez situada en Cartagena, federada de la Gran Logia Simbólica Española y perteneciente a la Masonería adogmática y liberal.
Con periodicidad se reúnen para tratar temas relacionados con la masonería, materias de actualidad, cultura y muchos otros, exceptuando siempre cuestiones relacionadas con política y religión. Según se recoge en los reglamentos de la Gran Logia Simbólica Española, un Triángulo es una formación masónica que, situada en una localidad en la que no existe una Logia, permite a los hermanos miembros de éste mantener lazos fraternales y promover la expansión masónica con el objetivo de crear una Logia.
Por tanto, el principal objetivo de este Triángulo es el de constituir, en un futuro, una Logia Masónica en Almería, hecho que esperan conseguir en el plazo de un año, o a lo sumo año y medio.
La masonería es una reunión de hombres y mujeres, que por encima de los diversos ideales políticos y religiosos, respetan la moral natural y desean conocerse a sí mismos para trabajar juntos, sin tener en cuenta rango social, político o religioso alguno, así como las diversidades de opinión. Trabajan para el mejoramiento personal y de la Humanidad. La masonería une a los hombres y mujeres en torno a valores de tolerancia, respeto mutuo y fraternidad, quedando estos valores recogidos en el lema representativo de la misma: Libertad, Igualdad, Fraternidad. La masonería no es un partido político, tampoco es una religión ni una secta, y mucho menos una sociedad secreta, puesto que las organizaciones masónicas están legalizadas y plenamente identificadas, cumpliendo como tales con la ley de asociaciones.
Tampoco tiene nada que ver con la multitud de leyendas con las que se le ha relacionado, en especial durante el franquismo, que la convirtió en la bestia negra a la que culpar de todos los males que ocurrían, desde pertinaces sequías a la pérdida de las colonias americanas. La masonería, que cuenta en todo el mundo con más de cinco millones de miembros, es conocida y muy respetada en muchas naciones como Francia, Inglaterra, Italia, Estados Unidos, Canadá y en toda Latinoamérica. En España se estima que hay unos cinco mil miembros activos repartidos entre las diferentes Obediencias, desde que fue legalizada por sentencia del Tribunal Supremo en 1979, cuando en España ya existía una constitución que avalaba y protegía las libertades individuales y colectivas.